Diseño gráfico.
Puede argumentarse que comunicaciones
gráficas con propósitos específicos tienen su origen en las pinturas
rupestres del Paleolítico y en el nacimiento del lenguaje
escrito en el tercer milenio a. de C. Pero las diferencias de métodos de
trabajo, ciencias auxiliares y formación requerida son
tales que no es posible identificar con claridad al diseñador gráfico actual
con el hombre de la prehistoria, con el xilógrafo del siglo XV o con el litógrafo de 1890.
El diseño de principios del siglo
XX, al igual que las bellas artes del mismo periodo, fue una reacción contra la
decadencia de la tipografía y el diseño de finales del siglo XIX.
El interés por la ornamentación y la proliferación
de cambios de medida y estilo tipográfico en una misma pieza de diseño, como
sinónimo de buen diseño, fue una idea que se mantuvo hasta fines del siglo XIX.
Los movimientos artísticos de la segunda década del siglo XX y la agitación
política que los acompañaba, generaron dramáticos cambios en el diseño gráfico.
Durante la década de 1930 se desarrollaron aspectos interesantes para la
composición del diseño gráfico. El cambio de estilo gráfico fue trascendental
porque muestra una reacción contra el organicismo y eclecticismo
ornamentalista de la época y propone un estilo más despojado y geométrico. Este
estilo, conectado con el constructivismo, el suprematismo, el neoplasticismo,
el De Stijl y el Bauhaus, ejerció una influencia duradera e ineludible en el
desarrollo del diseño gráfico del siglo XX. Otro elemento importante en relación
a la práctica profesional, fue el creciente uso de la forma visual como
elemento comunicacional.
La idea de simplicidad como característica de buen
diseño continuó presente por muchos años, no sólo en el diseño de alfabetos
sino también en otras áreas. La tendencia de simplificar influyó todos los
medios en la vanguardia del diseño en la década de 1950. La reacción a la cada
vez mayor sobriedad del diseño gráfico fue lenta pero inexorable. Los orígenes
de las tipografías post-modernas se remontan al movimiento humanista de los años
cincuenta sirvieron más para ratificar
el movimiento moderno que para rebelarse contra él.
Los avances de principios del siglo veinte fueron
fuertemente inspirados por avances tecnológicos en impresión y en fotografía.
En la última década del mismo siglo, la tecnología tuvo un papel similar,
aunque esta vez se trataba de ordenadores
Hoy en día, gran parte del trabajo de
los diseñadores gráficos
es asistido por herramientas digitales. El diseño gráfico se ha transformado
enormemente por causa de los ordenares. A partir de 1984, con la aparición de los
primeros sistemas de autoedición, los ordenadores personales sustituyeron de forma
paulatina todos los procedimientos técnicos de naturaleza analógica por
sistemas digitales. Por lo tanto los ordenadores se han transformado en
herramientas imprescindibles y, con la aparición del hipertexto y
la web, sus funciones se han extendido como medio de interactividad.